El cardenal Louis Raphaël I Sako exhorta a pedir a Dios que proteja al Líbano, a Irak y a los pueblos de la región de cualquier mal.
Una jornada de oración y ayuno, para este 8 de agosto en solidaridad con el Líbano, devastada el 4 de agosto por dos explosiones en el puerto de Beirut, en un depósito de nitrato de amonio: el Patriarcado Caldeo en Irak está promoviendo la iniciativa.
«El Cardenal Louis Raphaël I Sako, Patriarca de Babilonia de los Caldeos – se lee en el sitio – invita a todas las hijas e hijos de la Iglesia Caldea a dedicar una jornada de oración y ayuno en solidaridad con la Iglesia en el Líbano». «Pedimos a Dios -concluye la nota- que proteja al Líbano, a Irak y a los pueblos de la región de cualquier mal».
Mientras tanto, en Beirut el balance de las explosiones registró 149 muertos y más de 5.000 heridos, (según el último balance) sin contar los cientos de miles de personas que quedaron sin refugio debido al derrumbe de casas, iglesias, hospitales, hoteles y edificios públicos.